Tras su participación en el estelar “Morandé con Compañía”, conducido por Kike Morandé en el canal Mega y “El Discípulo del Chef”, Miguelito cosechó su fama en el territorio nacional, por lo que ha podido realizar con éxito la serie de comedia “Paola y Miguelito”.
Sin embargo, Miguelito ha sido noticia en los diferentes portales por una supuesta funa en su contra, por pedir dinero a cambio de tomarse fotos con sus fanáticos. Ante dichas acusaciones, el intérprete estuvo en el programa “Sígueme y Te Sigo”, donde se refirió a las acusaciones y desmintió una supuesta declaración de su parte.
De acuerdo al humorista, se enteró de dicha noticia gracias a sus amistades, ya que, no cuenta con redes sociales. “Alguien le comentó una foto a la Paola Troncoso. Yo no tengo redes sociales, entonces no sé. Pero ahí le pusieron que yo era déspota y trataba mal a la gente”, partió explicando.
“De hecho, esa fue una publicación de hace meses. Ayer un medio irresponsablemente retuiteó y le añadió cosas que jamás dije yo”, acusó entonces. En esa línea, leyó en vivo dicha noticia sobre la supuesta funa, señalando que no había sido contactado en ningún momento y que, por eso mismo, aquel portal había optado por borrar la publicación.
“La gente decía que estabas cobrando por fotos”, le consultó el animador del programa de TV+, Francisco Kaminski. A lo que él le respondió: “Efectivamente, yo hago sesiones de fotos, pero en los circos, que tiene un costo”, aseguró, argumentando, además, que esta práctica es algo que realiza desde hace tiempo.
“Siempre he hecho fotos con un costo pero en el circo. Yo lo hago hace años, no de ahora”, respondió entonces. Destacó que es una fotografía profesional que se entrega en físico, firmada. “La tomamos, la gente espera unos diez o quince minutos, lo revelan y luego se entrega”, describió.
En cuanto a las acusaciones de ser una persona déspota, dijo, “jamás he desatendido a la gente. De hecho, en las sesiones busco darme un par de segundos para hablar con toda las familias. Obviamente, uno de repente anda mal. Pero, estas cosas a uno lo bajonean, porque la gente empieza a hablar sin saber”.
“Lo que sí, es que a veces estoy comiendo con mi familia en un restaurante, ahí les digo que por favor me puedan esperar a que termine. Después de eso no hay problema. Pero hay personas que entienden y otras que no”, puntualizó Miguelito.