Convertir monedas es una operación que realizamos con frecuencia, ya sea para viajar, comprar por internet o invertir en el mercado de divisas. Sin embargo, no siempre lo hacemos de la forma más adecuada y podemos cometer errores que nos hagan perder dinero o oportunidades.
Estos son algunos de los errores más comunes que debes evitar al convertir monedas:
No comparar las distintas opciones de cambio
Existen diferentes formas de obtener la moneda que necesitamos, como bancos, casas de cambio, cajeros automáticos o tarjetas. Cada una tiene sus ventajas e inconvenientes, y también sus comisiones y tipos de cambio.
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Por eso, es importante comparar las distintas opciones y elegir la que más nos convenga según el importe, el destino y el momento.
No tener en cuenta el tipo de cambio real
El tipo de cambio que vemos en las noticias o en internet no siempre se corresponde con el que nos aplican al convertir monedas. Hay que tener en cuenta que hay dos tipos de cambio: el oficial y el real.
El oficial es el que fija el mercado interbancario y el que se usa como referencia. El real es el que nos ofrecen las entidades que cambian monedas y que suele incluir un margen o un recargo. Por eso, hay que fijarse en el tipo de cambio real y no en el oficial a la hora de convertir monedas.
No aprovechar las fluctuaciones del mercado
El tipo de cambio entre dos monedas no es fijo, sino que varía constantemente según la oferta y la demanda. Esto significa que podemos aprovechar las fluctuaciones del mercado para obtener un mejor cambio si somos flexibles y previsores.
Por ejemplo, si sabemos que vamos a viajar dentro de unos meses, podemos ir comprando la moneda poco a poco cuando esté más barata. O si queremos vender una moneda, podemos esperar a que suba su valor.
No revisar el recibo o el extracto
Cuando convertimos monedas, ya sea en efectivo o con tarjeta, es importante revisar el recibo o el extracto para comprobar que se ha hecho correctamente la operación y que no hay errores o cargos extra.
A veces puede haber diferencias entre lo que nos dicen y lo que nos cobran, o puede haber comisiones ocultas o duplicadas. Si detectamos algún problema, debemos reclamarlo lo antes posible.
No conservar las monedas sobrantes
Si nos sobran monedas después de un viaje o una compra, no debemos deshacernos de ellas sin más. Podemos guardarlas para un futuro uso, cambiarlas por otra moneda o donarlas a alguna causa solidaria.
Lo que no debemos hacer es cambiarlas de nuevo por nuestra moneda, ya que perderíamos dinero por las comisiones y el tipo de cambio.
Siguiendo estos consejos podrás evitar los errores más comunes al convertir monedas y ahorrar tiempo y dinero en tus operaciones cambiarias.