Siempre solemos recibir consejos sobre cómo debemos alimentarnos o cómo debemos actuar en determinadas ocasiones de la vida o con los otros.
También existen muchos mitos con respecto a la disposición de los objetos de la casa, es posible que también hayas escuchado o leído consejos sobre aquello, que a veces excede lo puramente decorativo. Una de las explicaciones las da el feng shui.
El feng shui es una práctica milenaria que busca la armonía y el equilibrio en los espacios, considerando la influencia que tienen los objetos y la ubicación de estos en nuestra energía vital. Los espejos son vistos como un elemento que puede influir en esa energía y, por lo tanto, en nuestro descanso y bienestar.
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Según esa filosofía, tener un espejo frente a la cama o el lugar donde se duerme puede hacer que la energía vital se disperse, afectando de forma negativa el sueño. Por esta razón, una de las recomendaciones es evitar tener espejos en el dormitorio o, en caso de tenerlos, ubicarlos de manera que no reflejen directamente la cama.
Cómo se colocan los espejos en la casa
Si en tu caso no quieres deshacerte de todos los espejos, es posible adaptarse a las necesidades y características de cada persona y espacio en particular, según las sugerencias publicadas por Semana.
- Evitar situarlos frente a los marcos de las puertas porque pueden ocasionar choque de energías.
- En el b*ño estaría permitido tenerlos, ya que allí se expulsa mucha energía y con la ayuda del agua, impide que rebote.
- Otro de los consejos más conocidos es tapar el espejo con una manta por las noches, y cualquier otro objeto que refleje la luz para descansar mejor.