Rebeca Naranjo, al día de hoy, es una celebridad dentro de la web, en donde cuenta solo en Instagram con más de 110 000 seguidores. Si bien su fama podría deberse a sus vínculos personales, ya que es la polola de Nano Calderón, el hijo de Raquel Argandoña, también podemos decir que forjó su carrera con dedicación.
Así, no es menor que Rebeca Naranjo eligió el camino de la creación de contenido, además de tener una marca de ropa que promociona de manera regular. Fue en el mundo digital que, intentando crear un lazo más unido con sus seguidores, respondió una ronda de preguntas vía historias, en donde un tema salió a la luz para no irse: su perro.
En este marco, fue un usuario quien le consultó que no comprendía el mensaje de la influenciadora sobre adoptar y no comprar, si ella tendría un "perro de dos palos". Con indignación, ella le respondió: "No, no vale 2, nos costó 3,5 (y no me arrepiento, para eso trabajamos)", para continuar arremetiendo: "Y cómo se nota que te encanta vociferar y juzgar antes de averiguar, te cuento".
"Siempre dije que cuando tuviera una casa adoptaría porque tendría un espacio digno donde estar, correr, jugar, etc. Acá sería imposible. Eso, linda noche", cerró el tema la novia de Calderón, aunque los internautas tenían más consultas sobre este tema y así se lo hicieron saber.
Frente a la crítica de una persona que expresó admirado el precio por una mascota, siendo que "hay tanto perro en la calle sin hogar, qué horror. Discurso contradictorio", la famosa le respondió sin filtros: "De seguro no los compraste tú", aseveró. En sintonía, manifestó: "Hoy ando sin paciencia".
Además, la crítica trascendió y le llegó también a su pololo, ya que un usuario sostuvo que de seguro "ven un perrito en la calle y hacen como que no vieron". Así, como respuesta adjuntó una noticia en la que Nano se fracturó las extremidades superiores por rescatar un animal.
Coquita y yo les deseamos linda noche.
De esta forma cerraba Rebeca Naranjo el conflicto sobre su can, a quien tiene hace casi dos años, con la convicción de que cuando tenga más espacio en su hogar tomará la decisión de adoptar. ¿Qué piensas de esta polémica?