Priscilla Vargas posee una extensa carrera en el mundo del periodismo y la conducción. Reúne más de 20 años de trayectoria dentro del ambiente, y es reconocida por dar las noticias televisivas. En cuanto a sus logros profesionales, se puede nombrar que fue ganadora del premio "Pobre el que no Cambia de Mirada", debido a su compromiso con la difusión de diversas problemáticas de índole social, entre las que quedan englobadas la vulnerabilidad y la pobreza.
Luego de casi toda una vida laboral en el canal Mega, Priscilla Vargas tuvo la increíble oportunidad de optar por otros rumbos y tomó la decisión de lanzarse a la nueva aventura que tenía junto a Canal 13, en donde se encarga de la acarreo de "Aquí Somos Todos", reemplazando a Soledad Onetto. Este paso no solo fue muy importante en su vida, sino que fue recibido con emoción por los colegas que se despidieron de ella. Hablamos sobre todo de Andrea Aristegui y José Luis Repenning.
Pero no todo sucede por la pantalla de TV para ella. Como ya lo hicieron miles de famosos, Priscila migró a las redes sociales, y allí crea contenido. En este lugar comparte fragmentos de su vida diaria y familiar, reuniones con amigos, pensamientos y reflexiones. Por su personalidad, reunió más de 527 000 seguidores, y muchos de de ellos son sus fanáticos.
Mensajes de cariño en su DM y collages de fotos subidos a redes no bastan para su club de fans. Es así que la asombraron con un increíble regalo en la puerta del canal, lo que la dejó rebozando de felicidad. A modo de agradecimiento, enseñó vía Instagram el obsequio inesperado.
Todo comenzó en el estacionamiento, cuando la célebre indicó: "Terminamos una semana más en el 'Aquí Somos Todos'. Recuerda: de lunes a viernes, desde las dos y media de la tarde hasta las cuatro, te acompaño en el cafecito, con galletita, con chocolatito después del almuerzo. La sobremesa la hacemos juntos".
Luego, ya en el vehículo, comenzó la sorpresa. "Acabo de salir del canal y me encuentro con la Sole, tan amorosa, que es de un fan club. Miren, me hicieron un lienzo. ¡Muchas gracias! Pero no solo eso: aquí caricaturas", comenzó a enseñar, para también grabar un bello cuadro enmarcado.
Se pasaron estas chiquillas.
"Me voy a bajar", sostuvo, y allí finalizaron las historias de Priscilla Vargas, aunque podemos suponer que le dio un abrazo a su fan y compartió un buen momento en su compañía, agradeciendo una vez más la actitud cariñosa que la dejó en shock y contenta.