Patricia Rivadeneira alcanzó la fama con su labor de actriz nacional. En cuanto a sus participaciones en el cine, podemos destacar "Cortázar, Capital Rayuela", "La Voz en Off", "Aurora" o "La Verónica". Algunas teleseries por las que se la recuerda son "Secreto de Familia", "Aquelarre" y "Juegos de poder" con Ingrid Cruz.
Con esto se puede observar que no ha pasado desapercibida en el mundo actoral, y no solo es fundadora conjunta de Escenix, la plataforma de streaming de teatro de Chile, sino que también fue Agregada Cultural del país en Italia entre 2001 y 2006. Su vida está marcada de historia, por ejemplo, Patricia Rivadeneira integró la Resistencia Cultural en los 80, para hacer frente a la censura de Pinochet.
Ahora fue una de las invitadas al ciclo de TV de Chilevisión, "La Divina Comida", en donde los participantes son los anfitriones que reciben a los otros miembros en sus viviendas, deleitándolos con los mejores platillos. Entre medio, por supuesto, conversaciones y diálogos se hacen presentes.
La emisión del programa ocurrió el pasado sábado 9 de abril, en donde la emisión contó con cuatro personalidades: Félix Soumastre, ex participante de realities; Luis Dubó, intérprete; Tutu Vidaurre, actriz; y la mencionada famosa cónyuge de Andrea Orsini.
La primera velada presentó como encargada a la amiga de Begoña Basauri. Recordemos que Tutu participó de "MasterChef Celebrity" y, por ello, cabe esperar una presentación y unos sabores de alto nivel en sus preparaciones. Con todos sus platos, las opiniones fueron inevitables.
Quien se sinceró y evaluó la entrada, ceviche de salmón a la que llamó "Master Mar", fue la artista, que sostuvo que “estaba estupenda, fue algo fresco, una muy buena elección para una noche de verano, me encantó”.
Luego llegó lo que no fue 100 % de su gusto y alcanzó críticas: el plato principal, "pero qué rollo". Este contaba de dos partes: una carne con panceta y un rollo de espinaca con ricota y tomate. Sobre él, expresó que "estaba rico, pero lo encontré un poco amargo, no me gustó tanto; la carne estaba rica, pero tampoco tan jugosa”.
Sin embargo, Patricia Rivadeneira matizó su crítica con un reconocimiento de su propia personalidad. “Igual soy una señora bien mañosa, pero eso es algo bien sabido en el ambiente". Para terminar, sí fue fan del postre, "Tutu otra vez", un crème brûlée que “estaba exquisito, en su punto, perfecto”.