Felipe Ríos sorprendió hace pocas horas en la pista del certamen de Canal 13 cuando confesó sobre una lesión que lo pone en la cuerda floja para continuar en competencia. Tras verse imposibilitado de seguir el ritmo que le tocaba, pasó directamente a la zona de eliminación del próximo jueves.
Pero lo último que aconteció tuvo que ver con una secuencia por fuera de las pantallas. Felipe Ríos hizo pública una llamativa situación que lo tuvo como protagonista en un reconocido restaurante capitalino. El actor se enojó ante el hecho y acusó directamente de haber sido marginado.
Un episodio poco agradable atravesó el participante de "Aquí se Baila" el martes pasado, luego de llegar a un renombrado local de comida de Santiago para celebrar el cumpleaños de su hermano. Según su relato en redes sociales, apenas ingresaron en familia al lugar, fue advertido por un personal de que no sería atendido en nombre de una insólita excusa: vestía chalas hawaianas como calzado.
En este marco, expresó: "Me pareció muy mala la medida y me senté igual haciendo valer mis derechos. Llamé a la garzona y tenía instrucción de no atendernos. Y no me moví. Pedí hablar con alguien para que nos solucionaran y explicaran mejor".
Pero lo cierto es que el hecho no terminó ahí. Notablemente indignado, el exparticipante de "MasterChef" contó: "Quería casi que le pidiéramos permiso para que nos atendieran. A los pocos minutos entró en razón, replicando nuevamente que no aceptaban gente en hawaianas”. Así, describió la situación como una "explicación ridícula y siúticamente clasista".
Seguidamente, el compañero de Begoña Basauri y Josefina Velasco en la competencia culinaria hizo un llamado a la reflexión. "¿Hasta cuando esas normas de mal gusto que hacen solo que uno no quiera ir más y además te amargan el momento?", se preguntó. Pero además, les habló directamente a los propietarios arrobando al restaurante en su comunicado.
"Ojalá recapaciten y dejen esta medida en verano o cuando sea. Uno paga por un servicio y no tienen por qué poner esas normas absurdas. Lejanas por completo de los tiempos que vivimos. No más restricciones de este tipo", sentenció, al mismo tiempo que pidió a sus seguidores que dejaran sus opiniones al respecto.
Entre un centenar de comentaristas indignados, Felipe Ríos recibió el apoyo de colegas reconocidos en el ambiente televisivo. La primera fue Amaya Forch que con ironía preguntó si se podía ir con minifalda; y le siguió Tutú Vidaurre preguntándose cómo vestir con tanto calor. Con hartas críticas para el funado, fueron todos los demás mensajes.