En la edición anterior del “El Discípulo del Chef”, Max Cabezón quien es un conocido cocinero e ‘influencer’ nacional participó y no llegó a la final, pues a pesar de toda su experiencia no logró el preciado premio.
En aquella oportunidad, Max Cabezón conoció a la también cocinera Miel Blanca, de quien posteriormente se haría pareja. “Soy un afortunado de haber conocido a Miel, nosotros entablamos una amistad muy bonita que subió un peldaño, a nivel de romance”, explicó el cuando comenzó su vínculo.
“Estudiábamos juntos y fue una ‘partner’. Aprendí de su cariño, conocimiento, experiencia y profesionalismo”, expresó respecto a la forma de ser de Miel Blanca.
Tras su salida de la competencia culinaria, se ha dedicado a su emprendimiento y hasta ahora no había hablado sobre el programa de cocina de Chilevisión. Ahora, en conversación con sus seguidores en redes sociales, Max se refirió al mencionado programa culinario y lo tildó de “controversial“.
“Para serte honesto, lo encontré más farándula que cocina. Es decir, la edición de todos los capítulos que vi, porque después sinceramente me aburrí de ver el programa”, partió diciendo en su publicación.
Asimismo, el cocinero indicó que, “era como que, o te enseñaban cuando tirabas un comentario pesado o cuando se creía que iba a haber polémica, o qué sé yo. O cuando a los chefs les soplaban por la muela ya, sé pesado, grítale”.
Es como ver la lucha libre al final, es como una mezcla de artes escénicas y gastronomía. No enseñan las decisiones de la cocina.
“Tiene mucho arreglo, la dirección de la tele influye caleta, los cortes, las técnicas”, comentó. Finalmente Max Cabezón calificó al espacio de cocina como “pobre“.