Laura Prieto está buscando su nuevo lugar en la televisión desde el cierre inesperado de "Me Late". Con un talento y belleza sin igual, ella ha logrado atraer la atención del público. Por ello, suma casi un millón de seguidores en su cuenta oficial de Instagram, los cuales no pueden esperar para saber cuáles serán sus próximos pasos.
Seguramente, podremos saber algo de ellos en la próxima emisión de "Podemos Hablar", donde Laura Prieto y el equipo del exciclo de TV+ hablarán tanto sobre su actualidad como sobre su futuro y pasado. Y es justamente sobre durante este último que a la famosa le ocurrió algo más que llamativo con una celebridad internacional.
De acuerdo a un adelanto que dejó ver Publímetro, parece ser que la panelista fue foco de interés por parte de nada más ni nada menos que de Luis Miguel, quien ya tiene antecedentes de haber puesto la vista en otras figuras nacionales, como Priscilla Vargas y Kenita Larraín.
Al parecer, todo ocurrió durante un show del mexicano en el Estadio Nacional: "Esto pasó cuando era bastante joven y pololeaba con el papá de mi hija. Me invitó al concierto de Luis Miguel. Primera fila y yo no era muy fan", confesó la también actriz. Entonces, con "Yo te Necesito” de fondo, el cantante habría comenzado a mirarla y luego le entregó una rosa.
Posteriormente, una vez finalizado el espectáculo, la comunicadora contó que un guardia se acercó a ella: "Me dice: 'Luis Miguel te quiere conocer y necesita tu número de teléfono'. Yo, coqueta, dije capaz que me quiera invitar a una comida con mi pololo”, siguió narrando.
Luis Miguel me dejó un mensaje de voz invitándome a Viña del Mar, porque tenía otro concierto al otro día. Mi pololo se enojó porque no le hablé.
Al parecer, como la recepción en el lugar de la performance no era demasiado buena, el rostro de televisión lo tenía que llamar al día siguiente. Sin embargo, nunca lo hizo, lo que, paradójicamente, enojó a su pareja de ese entonces.
De esta manera, Laura Prieto se convirtió en otra de las que podrían haber sido musas del Sol de México. Aún así, por lo que contó, parece que el padre de su hija estaba más emocionado que ella. ¡Excelente anécdota!