Tomás González es un reconocido gimnasta en el país que ha representado a Chile y, en ese marco, trajo numerosas medallas de las que se encuentra orgulloso. En esta ocasión, habló en “La Divina Comida” sobre una conocida historia acerca de la ayuda que recibió de un reconocido empresario.
Como sostiene Chilevisión, Tomás habló del apoyo recibido: el gimnasta contó que Leonardo Farkas lo llamó para ofrecerle ayuda monetaria para poder obtener unos aparatos deportivos específicos, cuando no tenía apoyo por parte del Estado.
Sentados a la mesa, los cuatro protagonistas de esta entrega estaban dialogando y el deportista tomó la palabra. Allí, comenzó la anécdota: “La federación históricamente no ha funcionado muy bien entonces no me habían inscripto a una copa, logré competir porque el presidente del comité olímpico se movió".
Con el logro, regresa a las tierras chilenas: “Vuelvo a Chile y me preguntan qué haría si no te apoya el Estado en este minuto, yo me quedé pensando y repetí un poco las tallas que a mí me decían mis amigos: 'Anda a hablar con Farkas'”.
Fuente: (Chilevisión).
Yo lo tiré como una broma y salgo del punto prensa, y me llama un representante de Leonardo Farkas.
Frente a la incredulidad del deportista frente a este acto, cuenta que el representante de la figura sostuvo que Leonardo quería reunirse con él en un día y horario. Sobre la reunión, comentó que “fue increíble porque yo le conté un poco mi historia, le conté que a futuro quería poner una escuela”.
En este marco, el empresario le preguntó qué necesitaba, a lo que el deportista respondió: “Lo único que necesito en este minuto son los aparatos donde yo compito después”, movió todo para conseguirlo y el gimnasta sostiene: “Yo no lo podía creer”.
Para finalizar la anécdota inolvidable, Tomás González expresó en el show: “Quedó en evidencia el poco apoyo que había por parte del Estado al deporte de alto rendimiento y fueron a mi casa como para convencerme”, hasta que su mamá sostuvo que no le podía decir a su hijo que deje pasar la oportunidad. En este marco, desde el organismo estatal compraron lo mismo que había encargado y lo pidieron ellos “como para quedar no tan mal”.