"MasterChef" se acerca a sus capítulos finales y, ante un nuevo desafío, los participantes debieron unirse para realizar platos idénticos separados por una pared. La complejidad estuvo en que solo podían coordinar a través de su voz y ser lo más exactos posible.
Una difícil prueba que llevó a los participantes de "MasterChef" a analizar cuáles han sido los temores que debieron desmoronar a lo largo de su vida y que, en un pequeño extracto en redes sociales, recibió una gran repercusión de los seguidores del estelar de cocina.
Cada uno de los ocho participantes relató qué ha debido derribar para seguir adelante. La primera fue Pepi Velasco que confesó que desde niña ha sufrido las críticas: "No tenía los cánones de belleza que tienen todas las niñitas", explicó.
En el caso de Begoña Basarui, afirmó que los muros se los ha puesto ella misma. "Creo que esos son los muros que más cuesta derribar y aquí estoy", se sinceró la actriz. Tutu Vidaurre, en su caso, habló de los estigmas y los prejuicios, pues ha sufrido miradas erradas sobre cómo es, juzgándola como superficial: "Me ponen esa barrera que hace que nos cueste conocernos de verdad".
Yamila Reyna también ha hablado de los prejuicios que ha enfrentado, pero afirma que lo que más la ha detenido en el pasado y logró derribar fueron sus miedos. Nataly Chilet, que representó a Chile en seis oportunidades, confiesa que tras lograr consagrarse como Miss Chile también llegaron muchos prejuicios. "Hay personas que solo se quedan con la imagen".
Al llegar el turno de los hombres del certamen, Gastón Bernaudou explicó la fórmula de cómo ha derribado los contratiempos que han surgido a lo largo de su vida. "Siempre fue todo esfuerzo y trabajo, nunca hubo algo demasiado grave como para que con un poquito de esfuerzo, trabajo y dedicación no salir adelante", explicó el artista argentino.
Por su parte, Felipe Ríos dio una respuesta diferente: "En la vida tuve que derribar muros cuando fui a ver el concierto de 'The Wall'", bromeó el excéntrico participante.
"MasterChef" transita su etapa final en esta segunda edición y anticipa que la eliminación dejará sin palabras al jurado. Cada gala suma complejidad y además hace más difícil despedir a los concursantes del reality de cocina. En las redes sociales ha pronosticado que hoy "la intensidad se sale de control", con pocos capítulos por delante veremos qué depara la noche del domingo para la audiencia.