La alimentación es un factor fundamental para mantener la salud de tu cuerpo y un bienestar general. Es por ello que, junto al deporte, son el 'dream team' para que puedas llevar una vida saludable. También lo agradecerá tu corazón.
Si deseas cuidar la salud de tu corazón, quédate a leer estos hábitos saludables. Se trata de factores que debes modificar (ya sea, para incluir o para excluir) de tu alimentación regular.
En primer lugar, un aspecto central es la ingesta de frutas y verduras: es importante la cantidad y la variedad. Las frutas y verduras están asociadas, según un reporte de la American Heart Association (AHA), a la reducción de la mortalidad.
"El consumo de una amplia variedad de estos grupos de alimentos proporciona los nutrientes esenciales y fitoquímicos adecuados. Todas las formas de frutas y verduras (frescas, congeladas, enlatadas y secas) se pueden incorporar a patrones dietéticos saludables para el corazón", sostienen.
Fuente: (El Colectivo).
En sintonía, un segundo punto fundamental es optar por fuentes de proteína que sean saludables y que sean comida real o buenos procesados. Siguiendo a la AHA, es recomendable elegir alimentos a base de plantas, tales como las legumbres.
"Es de destacar que reemplazar los alimentos de origen animal con alimentos integrales de origen vegetal tiene el beneficio adicional de reducir la huella de carbono de la dieta, contribuyendo así a la salud planetaria", sostienen. Sin embargo, se debe tener cuidado con aquellos alimentos a base de plantas que sean ultraprocesados, que pueden contener altas cantidades de azúcar, sal y aceites refinados.
Lo anterior nos lleva al punto siguiente: reducir los productos ultraprocesados. Estos están asociados con el sobrepeso y la obesidad, así como también a otras enfermedades como diabetes o enfermedad cardiovascular, según indican especialistas.
Estos son algunos consejos para cuidar tu corazón y tu alimentación. Además, puedes estar atento a otros aspectos, como la ingesta de alcohol, las bebidas con grandes cantidades de azúcar añadido o el exceso de sal en las comidas.